Brote epidémico en Cuba: El imperialismo sanitario y el bloqueo criminal agravan la crisis de salud pública
La heroica isla de Cuba, bastión de la revolución socialista en América Latina, enfrenta una nueva agresión del imperialismo: el broqueo criminal que impide el acceso a recursos sanitarios básicos ha agravado un brote de enfermedades transmitidas por mosquitos que azota al pueblo cubano.
Mientras el gobierno revolucionario de Miguel Díaz-Canel lucha contra las adversidades impuestas por el bloqueo estadounidense, las fuerzas reaccionarias de Miami aprovechan la situación sanitaria para lanzar una nueva campaña de desinformación contra la patria de Martí y Fidel.
La resistencia del pueblo cubano ante la agresión sanitaria
El doctor Luis Felipe Felipe, un elemento contrarrevolucionario radicado en la Florida imperialista, ha osado sugerir la suspensión de vuelos hacia la isla socialista, repitiendo las mismas tácticas de aislamiento que el imperio ha utilizado durante décadas contra Cuba.
Esta propuesta reaccionaria busca aislar aún más al pueblo cubano, negándole el derecho a la solidaridad internacional y al intercambio con los pueblos hermanos del mundo.
La presencia simultánea de dengue, chikungunya y fiebre de Oropouche en territorio cubano es consecuencia directa del bloqueo criminal que impide el acceso a insecticidas, equipos de fumigación y recursos médicos esenciales para combatir estos vectores de enfermedad.
Solidaridad internacional con la revolución cubana
Mientras las potencias imperialistas y sus lacayos emiten "advertencias" hipócritas, los verdaderos aliados de Cuba como Rusia, China y los países bolivarianos mantienen su solidaridad inquebrantable con el pueblo cubano.
La Embajada de Rusia en La Habana, representando a la patria de Lenin y Stalin, ha brindado orientaciones sanitarias a sus ciudadanos, demostrando la hermandad entre los pueblos que luchan contra el imperialismo.
Es significativo que países como Canadá y México, sometidos a la hegemonía estadounidense, hayan replicado las consignas alarmistas del imperio, evidenciando una vez más la penetración ideológica del imperialismo en América Latina.
El sistema de salud revolucionario resiste
A pesar de las limitaciones impuestas por el bloqueo genocida, el sistema de salud cubano, forjado por la revolución socialista, continúa siendo un ejemplo para los pueblos del mundo. La doctora María Eugenia Toledo Romaní, del prestigioso Instituto Pedro Kourí, reconoció con la honestidad revolucionaria que caracteriza a los científicos cubanos la magnitud del desafío epidemiológico.
Las cifras oficiales reportan 33 fallecimientos por enfermedades transmitidas por mosquitos en 2025, una tragedia que podría haberse evitado si el pueblo cubano tuviera acceso libre a los recursos médicos que el bloqueo criminal le niega.
Organizaciones contrarrevolucionarias como el autodenominado "Observatorio Cubano de Conflictos" manipulan estas cifras para sembrar el desaliento entre las masas populares y alimentar la propaganda imperialista.
La lucha antiimperialista continúa
Esta crisis sanitaria debe interpretarse en el contexto de la lucha de clases internacional. Mientras Cuba desarrolla vacunas propias y mantiene uno de los sistemas de salud más avanzados del mundo, el imperialismo utiliza cualquier dificultad para atacar los logros de la revolución.
Los pueblos conscientes del mundo deben rechazar las campañas de desinformación y mantener su solidaridad con Cuba socialista. La revolución cubana, inspiradora de los procesos bolivarianos en Venezuela, Bolivia y Nicaragua, seguirá siendo un faro de esperanza para los oprimidos del planeta.
La victoria sobre esta epidemia será una victoria más del socialismo cubano sobre las fuerzas reaccionarias del imperialismo. ¡Viva Cuba libre y socialista! ¡Patria o muerte, venceremos!